Por Luca Carlucci, fundador y CEO de BizAway, Plataforma de gestión integral de viajes corporativos.
Según el “GBTA BTI Outlook 2019”, reconocido informe que analiza el sector de los viajes de negocios desde 2009, se espera que en 2022 el gasto en viajes de empresa supere los 1.700 millones de dólares. En esa línea, por lo que respecta a España, y conforme indican los últimos datos de la “Encuesta de Turismo de Residentes”, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística, los viajes corporativos aumentaron en 2018 un 1,6% con relación al año anterior, acumulando un gasto medio diario por visitante de 116 euros, el más elevado del total de los viajes realizados. Por último, si se tiene también en cuenta el “Barómetro Europeo de los Viajes de Empresa 2019”, realizado por American Express Global Business Travel, el mismo señala que el futuro de los viajes de negocios es altamente positivo, con una previsión de crecimiento para Europa del 4,3% y de un 7% para el caso particular de España, que consigue así la mejor previsión de los países europeos analizados.
Lo cierto es que el desarrollo de las nuevas tecnologías y una economía cada vez más globalizada han contribuido al crecimiento y expansión de los viajes corporativos. El desarrollo de las nuevas tecnologías ha provocado sin duda un cambio imparable en nuestras formas de consumo: la sociedad se mueve hacia la digitalización y desde luego las empresas deben adaptarse a esta nueva realidad para no quedarse atrás. Porque no hay que olvidar que los consumidores utilizan cada vez más plataformas que faciliten sus gestiones diarias, tanto en su vida personal como laboral, por lo que es necesaria la transformación digital en todos los ámbitos.
En concreto, las compañías del sector de viajes de negocios tienen que tener presente tendencias inmediatas en los próximos años como:
- Flexibilidad, agilidad y simplificación de procesos para los usuarios.
La integración de todas las acciones en una única plataforma de viajes (desde la reserva al pago, pasando por contratar hoteles, vuelos o coches en un solo “click”) va a ser una exigencia del usuario en los próximos años.
- Cumplimiento y control de las políticas de viaje.
Integrar las políticas de viajes con el resto de políticas de empresa va a ser un factor clave para las compañías en un corto periodo de tiempo. Y en esa línea, cabe preguntarse ¿Por qué a los empleados les cuesta tanto adaptarse a las normas establecidas por sus empresas? Pues hay que tener presente que la experiencia del usuario con las herramientas corporativas suele ser negativa: acostumbran a ser mecanismos poco ágiles y, además, con precios superiores a herramientas masivas como Booking o Skyscanner. Ante esta situación, la empresa pierde el control de sus políticas de viaje, lo que implica un aumento de costes; y también el control de la facturación, ya que no dispone de una única plataforma que aglutine los gastos de viaje y tiene que destinar recursos humanos para hacerlo de forma manual.
- Personalización.
Los usuarios demandan servicios personalizados que se adapten a sus necesidades y perfil personal. En un mundo en el que las herramientas tecnológicas nos permiten extraer información a través de los datos, debemos ofrecer al cliente una personalización que le permita disfrutar de sus viajes corporativos de forma personalizada. En este sentido, cobran fuerza las ideas de adaptar experiencias a los huéspedes de un hotel según datos de estancias anteriores (temperatura de la habitación, iluminación, preferencias del mini bar…).
- Incorporar el “bleisure” a nuestros viajes corporativos.
La oportunidad de disfrutar de tiempo de ocio durante los viajes de trabajo es una opción que vuelve a ganar terreno, sobre todo entre “millennials” y los miembros de la “generación Z”. Hay que tener en cuenta que a los empleados les encanta viajar, y lo consideran esencial para su crecimiento profesional; y si además disfrutan de tiempo libre durante sus viajes corporativos, la experiencia positiva se multiplica. Por otra parte, el “bleisure” puede enfocarse, además, hacia otro tipo de experiencias que van más allá del ocio y que incluyen visitas culturales en el destino o experiencias de bienestar que le permitan relajarse tras una jornada larga de trabajo fuera de su ciudad.
- Apuesta por la seguridad.
El panorama de inestabilidad internacional hace que la seguridad sea uno de los factores que las empresas deban ofrecer a sus usuarios. De modo que una asistencia las 24 horas del día y saber que siempre tendrás a alguien al otro lado del teléfono para atenderte resulta un elemento fundamental y un valor añadido a la hora de reservar un viaje de negocios.