Autores: Francisco Abad y otros.
Editorial: LID Editorial Empresarial (Colección “Acción Empresarial”) 2014.
Hemos llegado al 2030 y la sociedad, la economía, la tecnología y hasta las empresas que tenemos son muy diferentes a como se pensaba en 2014 que podían llegar a ser. No, al final, no ha se ha producido desde entonces una mera evolución lineal de lo que había entonces, sino que los cambios han sido muy profundos en todos esos entornos.
Una transformación que nos cuentan precisamente, ya en 2014, un total de 28 expertos, que, coordinados por el observador, asesor estratégico e impulsor de procesos de innovación social en grandes compañías Francisco Abad, se atreven a avanzar en este libro lo que nos deparará el futuro en diferentes ámbitos, con incidencia especial en el de la psicología y la sociología, y no solo en el de la política y la economía, como se ha hecho habitualmente en otros volúmenes.
Y en ese sentido, los autores, desde un general optimismo, adelantan (confían) en concreto una sociedad que habrá progresado y será más humanizada y mejor, pero siempre que se sigan una serie de sugerencias que desde aquí se ofrecen para generar alternativas a la situación actual tanto al sector público como al privado y al tercer sector.
El libro se estructura así en tres grandes apartados (sociedad y tecnología, economía y raíces personales) y un total de 23 capítulos en los que los 28 expertos exponen sus ideas sobre otra manera de entender la sociedad, la economía, la empresa, y diferentes escenarios. En el primero de los apartados, el dedicado a la sociedad y a la tecnología, se reflexiona sobre cuestiones como: cuánta y cómo será la población; el problema del envejecimiento; los cuidados de los mayores; la economía del bien común como posible modelo; la innovación social tanto desde el enfoque economicista como desde el socio-ecológico; la futura realidad fiscal y su situación ideal; la virtualización de la identidad (personalización de la tecnología, el almacenamiento de la información, el peso de las emociones en la vida digital, las relaciones sociales reticulares…); la llegada de la revolución inteligente; las transformaciones sociales que propiciará el cambio tecnológico; la evolución de la gestión del conocimiento y el peso al respecto del libro digital.
En la segunda parte, orientada al futuro del la economía y de la empresa, se desarrollan aspectos como el empleo en el futuro; las nuevas formas de trabajar; la posibilidad de ocuparse siempre en un sitio distinto o de estar siempre en casa y tendencias como hacerlo uno mismo en lugar de comprarlo, el consumo colaborativo, las finanzas participadas, el renacer de las ciudades, la producción a pequeña escala y con diseños abiertos, etc.; el comercio justo y su proyección como herramienta global, además del reparto de la riqueza; la alfabetización financiera y las nuevas relaciones con la banca; el presente y el futuro de la responsabilidad social de las empresas; y el paso del poder de la gestión a la gestión del poder.
Finalmente, la tercera parte del libro se dedica a las raíces personales, en el que se tratan asuntos como: la imposibilidad de la utopía; la revolución educativa; la ética y los negocios; el espiritualismo de la sociedad en el futuro; el cuidado del entorno, la posibilidad de vivir en realidad con menos, etc.
De esta manera, resulta una obra distinta que invita a soñar, porque, como dice el propio Francisco Abad en el último de los 23 capítulos, “aventurar el futuro es una tentación apasionante que nos traslada a un mundo mágico. Me fascina tanto que confieso mi afición a provocar la generación de ideas y casualidades explorando activamente escenarios disruptivos”. Y en ese objetivo anima a ser optimista y a apostar por el progreso. Eso sí, teniendo en cuenta que, para construir el futuro, es preciso empezar ya hoy. Y también que es posible llegar a ser lo que queremos ser.
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